Quiénes somos

Por tu presente y futuro

En términos históricos, la seguridad social nació con un propósito: cubrir a un determinado grupo social frente a diversas contingencias, sean estas: vejez, desempleo, enfermedad, invalidez, incluso la muerte. De allí que, el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas, Issfa, fue creado el 7 de agosto de 1992, con el objetivo de consolidar y fortalecer la protección del soldado ecuatoriano ante los riesgos propios de la carrera militar, tomando en cuenta que no está en el panorama prestacional únicamente el personal en servicio activo o pasivo, también está su familia. 

De lo que fue hace 30 años, cuando el Issfa nacía con 58 funcionarios, entre civiles y militares, hombres y mujeres, hoy somos 412, con un campo de acción más extenso, dinámico y enlazado con la tecnología de vanguardia vinculada con la población asegurada en estas tres décadas de recorrido, sin dejar de lado el objetivo de ser una institución de servicio de excelencia en el campo de la seguridad social militar, teniendo como herramientas esenciales los estudios técnicos, financieros, estadísticos y actuariales, todo, con base en una planificación de corto, mediano y largo plazo.

Claro que todos estos procesos giran en torno a lo más preciado de toda institución, el recurso humano, un aliado estratégico profesional, capacitado y con alto espíritu de servicio. 

La creación de las pensiones militares puede considerarse como uno de los logros sociales y profesionales más significativos de la institución militar, este hito histórico, pionero en américa, obra de la revolución juliana, culmino el 26 de marzo de 1928 con la expedición de la ley de retiro militar publicado en el registro oficial 601 de la misma fecha, simultáneamente con la ley de montepío militar. Este hecho permitió a nuestro país ser el primero en Latinoamérica en disponer de un sistema de seguridad social militar.

La Ley de Seguridad Social Militar vigente, constituye la culminación de los principios y proyecto que como bandera de lucha enarbolaron los militares agrupados en la famosa liga de oficiales gestores de la Revolución Juliana.

Gracias al impulso dado al proyecto por autoridades militares y su especial interés en materializarlo, se expide la Ley de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas el 7 de agosto de 1992, publicada en el Registro Oficial no. 995 de la misma fecha.

A diferencia de la seguridad social militar del mundo occidental,  que se financia íntegramente con recursos del estado, la nuestra se concibe como en un régimen contributivo y solidario que se lo gestó en el ideal y espíritu del militar ecuatoriano, comprometido con los más caros intereses nacionales, aliviando el esfuerzo del estado.

La seguridad social militar cubre al militar contra los riesgos a que se expone en el su ejercicio profesional y busca el bienestar suyo y de su familia, ajustándose a las determinantes de la organización.

Actualmente el instituto tiene su matriz en Quito, en el sector de Iñaquito y con el fin de brindar un mejor servicio a los afiliados de la capital, atiende en tres agencias: Hospital de Especialidades de Fuerzas Armadas, Issfa Sur y San Jorge, adicionalmente cuenta con la regional Issfa Litoral en Guayaquil y sus agencias ubicadas en todas las capitales de provincia.

La acción protectora del instituto, no solamente cubre los riesgos futuros como es el retiro y la cesantía mediante prestaciones que se efectivizan cuando el militar se retira, sino que abarca todos los eventos de riesgo asociados a la carrera militar. Nuestro sistema de seguridad social, mantiene su acción protectora desde el momento en que el militar es aspirante y continúa aún después de su muerte, amparando a sus dependientes y derechohabientes.